El deporte de Durango ha perdido a una de sus figuras más representativas. Francisco Javier Sifuentes Ramírez, atleta máster y profesor de educación física, falleció el martes 3 de junio de 2025 a la edad de 68 años en Guadalajara, Jalisco. Con su partida, se apaga una luminaria que dejó un legado impresionante en el atletismo duranguense y una huella imborrable en la formación de generaciones de deportistas.
A lo largo de su vida, Sifuentes Ramírez demostró ser una verdadera leyenda en su disciplina, tanto en el ámbito competitivo como en su labor como educador. Su historia deportiva comenzó desde muy joven y continuó hasta su jubilación, pero nunca dejó de competir, siempre manteniendo la pasión y la entrega que lo caracterizaron.
Un Comienzo Prometedor en el Atletismo
Francisco Javier nació en Durango en 1957 y desde temprana edad mostró un gran interés por el deporte. A los 11 años, ya competía en pruebas de atletismo en la primaria Lorenzo Rojas, marcando el inicio de una trayectoria brillante. A medida que avanzaba en la escuela, se fue consolidando como uno de los atletas más destacados de su generación.
En secundaria, brilló en las competencias inter escolares, lo que le permitió llegar a etapas prenacionales entre 1969 y 1971. Durante sus años en el bachillerato, vestía con orgullo los colores del CECYT 281, donde se coronó tricampeón nacional en las pruebas de 800 y 1500 metros planos en los Juegos DGETI. Un logro increíble para un joven atleta que prometía mucho más.
El Oro en los Juegos Nacionales de la Revolución
Uno de los momentos más destacados de su carrera fue en los Juegos Nacionales de la Revolución, donde, representando al sector popular duranguense, Francisco Javier Sifuentes se colgó la medalla de oro en los 1500 metros planos en dos ediciones. Este doble triunfo consolidó su nombre en el atletismo nacional y lo posicionó como uno de los grandes corredores de su época.
De Maestro a Campeón: La Constancia de Sifuentes
Como profesor de educación física, Francisco Javier continuó con su dedicación al deporte. Fue representante de la Sección XII del SNTE en las competencias nacionales magisteriales, siempre destacando en la prueba de 5000 metros. A lo largo de su carrera como maestro, se mantuvo en el podio nacional, ocupando siempre los primeros tres lugares.
Sin embargo, lejos de alejarse del atletismo, Sifuentes Ramírez siguió con su carrera competitiva incluso después de su jubilación en 2010. Fue entonces cuando comenzó a participar en las competencias del ISSSTE para jubilados y pensionados, donde reinventó su carrera y continuó dominando las pruebas de medio fondo. Durante ocho años consecutivos, se coronó campeón nacional en dichas competiciones, manteniendo un nivel de competencia envidiable.
El Éxito Internacional: Tres Oros en Costa Rica y Subcampeón en Canadá
En 2015, Francisco Javier dio el siguiente paso en su carrera y se unió a los campeonatos nacionales máster. En esa categoría M60, logró ser campeón nacional en las pruebas de 800, 1500 y 5000 metros. Sin embargo, su mayor consagración internacional llegó en 2018, cuando participó en los Juegos Centroamericanos Máster en San José, Costa Rica, donde ganó tres medallas de oro.
Un año después, en Toronto, Canadá, subió al podio del Campeonato NORCECA, obteniendo la medalla de plata en los 800 metros planos. Con estos logros, su nombre resonó no solo en México, sino también en el ámbito internacional, consolidándose como un referente para los atletas máster.
Un Espíritu Inquebrantable
A pesar de los años y las dificultades, Francisco Javier Sifuentes Ramírez nunca dejó de competir. En los últimos años, participó en pruebas de ruta de 5, 10 y 21 kilómetros, donde se mantuvo entre los primeros lugares de su categoría, demostrando que la edad no era un impedimento para seguir alcanzando grandes logros.
Su dedicación al deporte y su entrega en cada prueba lo convirtieron en una figura entrañable para la comunidad duranguense, tanto dentro como fuera de las pistas. Francisco Javier no solo fue un campeón en el atletismo, sino también un ejemplo de constancia, pasión y compromiso.
Miembro del Salón de la Fama: Un Reconocimiento Bien Merecido
En reconocimiento a su extraordinaria trayectoria, Francisco Javier Sifuentes Ramírez fue incluido como miembro del Salón de la Fama del Deporte Duranguense. Este honor, que solo se otorga a aquellos que han elevado el nombre del estado con sus logros deportivos, es un reflejo de la huella imborrable que dejó en el deporte y en la comunidad.
El Legado de Francisco Javier Sifuentes Ramírez
El legado de Francisco Javier Sifuentes Ramírez trasciende más allá de sus victorias y medallas. Su pasión por el deporte, su amor por la competencia y su dedicación al desarrollo de nuevos atletas lo convirtieron en un modelo a seguir para las generaciones de jóvenes que lo conocieron y se inspiraron en su historia.
Hoy, su nombre vivirá en cada pista de atletismo, en cada corredor que siga sus pasos y en cada atleta que se esfuerce por dar lo mejor de sí mismo, tal como lo hizo Francisco Javier durante su exitosa carrera.
Descanse en paz, una verdadera leyenda del deporte duranguense.