Los Rieleros de Aguascalientes salieron con el tren a todo vapor y con una ofensiva demoledora de 16 imparables, vencieron por 13 carreras a 6 a los Algodoneros del Unión Laguna, rescatando así el último juego de la serie en el Estadio de la Revolución. Fue un duelo con fuego cruzado, batazos de largo alcance, errores costosos y una montaña rusa de emociones para la afición lagunera.
Arranque explosivo de los Rieleros
Desde el primer inning, los visitantes demostraron que no iban a entregar la serie sin pelea. Orlando Martínez abrió con doblete al izquierdo y fue empujado por Andretty Cordero con un sencillo, marcando la tónica del juego desde temprano.
Aunque Laguna respondió de inmediato con Isan Días anotando tras un doble de Jonathan Schoop, el segundo episodio fue el inicio del verdadero caos para el pitcheo local. Tras una base por bolas a Saúl Garza, llegó el primero de varios bombazos: Sebastián Lizárraga conectó cuadrangular por el izquierdo, y Ángel Camacho aprovechó un balk para anotar. Cordero, encendido toda la noche, produjo otra más con doblete. Así, el rally de cuatro dejó la pizarra 5-1, con los locales tambaleando.
Laguna responde... pero no alcanza
En el fondo del segundo inning, Julián Escobedo consiguió una carrera "gratis" al recibir pasaporte con las bases llenas, pero la ofensiva visitante no dio tregua. En el tercer rollo, Lizárraga volvió a producir con un elevado de sacrificio, y en la cuarta, Ángel Reyes se fue para la calle con un solitario tablazo, colocando el marcador 7-2.
El Unión Laguna trató de mantenerse en la pelea. En el cierre del cuarto, Alfonso Rivas abrió con doblete y logró anotar tras un wild pitch del relevista Juan Carlos Sulbarán, quien a pesar de ese error, se llevó la victoria con 2.2 entradas de labor efectiva, permitiendo apenas un hit y una carrera.
El quinto fue mortal
Si algo terminó de enterrar al Unión Laguna fue la quinta entrada, donde los Rieleros anotaron otras cuatro carreras. Primero, Cristian Villanueva se voló la barda con cuadrangular solitario ante Brady Tedesco. Después, con las bases llenas, Orlando Martínez volvió a encender la dinamita, conectando un grand slam ante Tyler Wilson que prácticamente sentenció el juego, dejando la pizarra 11-3.
Reacción guinda que ilusionó
En la séptima, los Algodoneros del Unión Laguna dieron señales de vida. Julián Escobedo anotó desde primera con doblete de Nick Torres, y enseguida, Isan Díaz sacó su sexto jonrón de la campaña por el jardín central, reduciendo la ventaja a 11-6.
La afición se animó, soñó con la remontada, pero los Rieleros respondieron rápido. En la octava, Cordero siguió produciendo con sencillo al derecho, y en la novena, Ángel Camacho cerró la cuenta con otro imparable productor al central, sellando el 13-6 final.
Cordero, Lizárraga y Martínez: tridente imparable
Lo de Andretty Cordero fue simplemente espectacular. Terminó con tres producidas, dos dobletes y una noche de pesadilla para los lanzadores locales. Sebastián Lizárraga también se lució con jonrón y elevado de sacrificio, mientras que Orlando Martínez se consagró con cinco carreras impulsadas, incluida la joya del partido: el grand slam que silenció el estadio.
Laguna, a olvidar rápido
Para los Algodoneros del Unión Laguna, esta derrota es un golpe anímico, pero no hay tiempo para lamentaciones. Mañana arranca nueva serie en el Estadio Francisco I. Madero ante los Saraperos de Saltillo, y el primer encuentro está programado para las 19:30 horas.
Con un bullpen desgastado y una ofensiva que por momentos respondió, el equipo lagunero deberá reenfocar su estrategia si quiere mantenerse competitivo en esta parte crucial del calendario.
