En Durango, la educación da un giro hacia la sustentabilidad gracias a una iniciativa fresca y ambiciosa impulsada por la diputada Blasa Doralia Campos Rosas, del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). La propuesta busca reformar la Ley de Educación del Estado para incorporar un programa integral que transforme las escuelas públicas en verdaderos espacios de conciencia ambiental y sustentabilidad.
Educación con enfoque ecológico
Desde la Comarca Lagunera, una región con profunda vocación agrícola y desafíos ambientales significativos como la escasez de agua, Campos Rosas eleva la voz para que la educación sea la base de una transformación real. “Hagamos de la educación en Durango una fuerza transformadora para el presente y el futuro”, declara con firmeza, recordando que el cambio climático y la contaminación no son amenazas lejanas, sino realidades palpables que requieren acción inmediata desde las aulas.
Impacto comprobado de la educación ambiental
La UNESCO ha reportado que los estudiantes expuestos a programas prácticos de educación ambiental muestran hasta un 30% más de compromiso con el cuidado ecológico. Este dato refuerza la urgencia de implementar un modelo educativo que forme nuevas generaciones conscientes y responsables, capaces de enfrentar los retos ambientales que ya afectan a las comunidades duranguenses.
Componentes de la propuesta
La iniciativa de Morena plantea acciones concretas para transformar la infraestructura y el currículo educativo en Durango, entre las que destacan:
Instalación de paneles solares en escuelas para promover energías limpias.
Estrategias de ahorro energético que podrían reducir el consumo hasta en un 20%, según datos de SEMARNAT.
Sistemas de captación pluvial y tratamiento de aguas residuales para optimizar el uso del agua.
Uso racional del recurso hídrico en todos los planteles educativos.
Implementación de contenedores diferenciados para fomentar el reciclaje desde edades tempranas.
Posible reducción del 15% en desechos escolares, conforme a estadísticas del INEGI.
Promoción del arraigo al campo, salud alimentaria y aprendizaje práctico para conectar la identidad agrícola con la educación ambiental.
Educación y sustentabilidad: un binomio necesario
La propuesta no solo contempla cambios técnicos y de infraestructura, sino también un cambio cultural profundo, que enlace la identidad agrícola de la región con la formación ambiental. Esto permitirá que los estudiantes comprendan la importancia de cuidar el entorno natural y valoren el trabajo en el campo como parte fundamental de su herencia y futuro.
Un llamado urgente y esperanzador
Blasa Campos subraya la importancia de actuar hoy: “Los retos ya están aquí: el cambio climático, la escasez de agua, la contaminación. No podemos esperar más. Si queremos respuestas duraderas, debemos empezar desde donde todo comienza: desde las aulas.”
Este mensaje refleja el espíritu del proyecto de transformación de Morena, enfocado en el bienestar colectivo y la sostenibilidad para las próximas generaciones.