Durango está dejando huella en la industria cinematográfica con el estreno del cortometraje “Ojos de Lagarto”, un proyecto que no solo resalta los paisajes espectaculares del estado, sino que también genera un impacto económico y social significativo. Este cortometraje, grabado 100% en Durango, es un claro ejemplo de cómo el estado sigue consolidándose como un destino fílmico ideal, atrayendo producciones nacionales e internacionales.
El cortometraje, financiado por iniciativa privada y respaldado por la familia del director Alonso Quintero Fregoso, combina la esencia del western con toques de fantasía, presentando una historia única ambientada en 1923, en el contexto de la chinesca, una red clandestina de tráfico de opio y alcohol. Con un presupuesto cercano a los 5 millones de pesos, el proyecto no solo se destaca por su contenido, sino también por su impacto económico, que benefició a más de 80 personas locales que participaron en diferentes áreas, desde producción hasta talento.
El apoyo del Gobierno del Estado
Uno de los pilares clave para la realización de este cortometraje fue el apoyo brindado por el Gobierno del Estado de Durango, a través de la Secretaría de Turismo y la campaña “Durango, un Mundo de Cine”. El apoyo en logística, permisos y seguridad ha sido fundamental para el éxito del proyecto, consolidando a Durango como un destino cinematográfico atractivo para los realizadores de todo el país y el mundo.
La Secretaría de Turismo ha jugado un papel esencial al proporcionar las condiciones necesarias para que el proyecto se llevara a cabo sin contratiempos, asegurando que Durango continúe siendo una opción viable para la industria del cine. Además, esta colaboración resalta la capacidad del estado para convertirse en un destino de calidad para la filmación de películas y cortometrajes, con una infraestructura adecuada y un entorno natural impresionante.
Un cortometraje con un fuerte toque de fantasía
El cortometraje, que explora el mundo de la chinesca y los mitos fantásticos, narra la historia de un cirujano viudo y su hija que, al intentar cruzar a Estados Unidos, enfrentan desafíos con la mafia china. Lo que hace único a este proyecto es la mezcla de elementos fantásticos, como la capacidad de la niña para comunicarse con ratones y serpientes, y la aparición de un dragón oculto en el subsuelo.
La trama, inspirada en hechos históricos de la época, mantiene al espectador al borde de su asiento mientras explora temas como el tráfico ilícito, la familia y el misterio sobrenatural. Esta combinación de géneros hace de “Ojos de Lagarto” un cortometraje innovador que promete atraer a una audiencia diversa.
Empleo y economía local
Más allá del impacto cultural, el cortometraje ha tenido un impacto económico significativo en Durango. Más de 80 personas locales fueron contratadas para trabajar en distintas áreas de la producción, incluyendo extras, staff, transporte, catering y otros aspectos técnicos. Esto no solo permitió que los residentes locales se involucraran en un proyecto cinematográfico de alto nivel, sino que también contribuyó a dinamizar la economía de la región, con una derrama económica cercana a los 5 millones de pesos.
Además, actores y miembros del staff destacaron la hospitalidad y la calidez de la gente de Durango. Olivia Aray, quien interpreta a la hija del protagonista, expresó su entusiasmo por filmar en el estado, mientras que Jorge A. Jiménez, quien da vida al padre, comentó sobre lo acogedores que fueron los locales durante su estancia. Por su parte, Víctor Alfredo Jiménez, quien interpreta al villano, destacó la amabilidad de los duranguenses, incluso mencionando un obsequio recibido en el mercado de Gómez Palacio.
Durango: una joya cinematográfica
El productor Luis Armando Bruno Martínez resaltó que Durango sigue siendo “la joya escondida” de las producciones cinematográficas en México, con un potencial enorme para futuras producciones. La infraestructura del estado, que va desde las sierras hasta los desiertos, ofrece escenarios ideales para la creación de películas de diversos géneros.
“La variedad de escenarios en Durango es única. Desde sus paisajes desérticos hasta sus montañas, cada rincón es perfecto para ser el fondo de cualquier historia.”
Este tipo de entornos naturales son los que atraen a cineastas de todo el mundo, y Durango sigue demostrando que es capaz de ofrecer todo lo necesario para llevar a cabo producciones cinematográficas de calidad.
Un elenco diverso y entusiasta
En cuanto al elenco, la diversidad y el talento no faltaron. La película contó con la participación de actores internacionales como Taichi Koga y Darren Lo, ambos actores de artes marciales, quienes no solo fueron parte del elenco, sino que también destacaron lo mucho que les gustó trabajar en Durango. Darren Lo incluso mencionó que la ciudad ya es su favorita por la comida, paisaje y, sobre todo, la gente.
“Estuve en Durango para filmar y, sin duda, se ha convertido en mi lugar favorito en México. Todo, desde la comida hasta el paisaje, ha sido increíble.”