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Drones agrícolas impulsan el campo duranguense

Con drones agrícolas, Esteban Villegas moderniza el campo duranguense con subsidios, tecnología y apoyo a productores locales.

La revolución en el campo ya no es un sueño lejano: en Durango, los drones agrícolas ya están sobrevolando las cosechas. Y no es ciencia ficción. Es una política pública bien aplicada, pensada y ejecutada por el Gobierno del Estado, bajo la visión del gobernador Esteban Villegas Villarreal, quien ha dejado claro que la agricultura también puede (y debe) ser inteligente, precisa y moderna.

Desde Canatlán, Durango, se encendió el motor del cambio rural. Y no con tractores ni maquinaria tradicional, sino con drones T50, los cuales ya están transformando la forma en que los productores trabajan sus tierras.

Tecnología en manos del campo

El campo está renaciendo”, afirmó Villegas con entusiasmo. Pero no lo dijo como promesa de campaña, sino como una realidad tangible, que ahora se vive en cientos de parcelas donde el tiempo, el dinero y el esfuerzo rinden más.

¿El secreto? Drones agrícolas de alta gama capaces de fumigar, fertilizar, mapear e incluso sembrar cultivos con precisión quirúrgica. Un solo dron puede cubrir en una hora lo que un tractor hace en tres días. Así de contundente es la diferencia.

Modelo con responsabilidad compartida

Este cambio de paradigma agrícola en Durango no solo es tecnológico, también es económicamente accesible gracias al esquema que impulsa el gobierno estatal:

  • El 50% del servicio de aplicación es subsidiado.

  • El productor elige y aporta el agroquímico.

  • La operación está a cargo de personal técnico capacitado de la SAGDR.

Así, el productor no tiene que hacer grandes inversiones en equipo ni especializarse en tecnología. Todo el proceso es acompañado, guiado y facilitado.

Apoyo directo al productor

La implementación de estos drones no solo es futurista: es inteligente y solidaria. Se está pensando especialmente en los pequeños y medianos agricultores, quienes históricamente han quedado fuera de la tecnificación agrícola por falta de recursos o apoyo.

Y es que los beneficios son claros y comprobables:

  • Reducción drástica de costos operativos.

  • Ahorro de tiempo en labores agrícolas.

  • Fumigación precisa, incluso en terrenos complicados.

  • Menor impacto ambiental.

  • Mejor rendimiento por hectárea.

Inversión histórica para el campo

Esto no es solo un par de drones volando sobre el campo. Detrás hay una inversión estratégica que ronda los 40 millones de pesos aplicados a 12 proyectos fitosanitarios, todos con enfoque de tecnificación, inocuidad y sanidad agropecuaria.

Además, se destinaron 1.37 millones de pesos estatales para adquirir dos drones T50 totalmente equipados, herramientas que hoy ya están cambiando el ritmo de trabajo agrícola.

Apoyo con visión de futuro

Para el gobernador Villegas, esto es apenas el inicio de un modelo que busca:

  • Dignificar la vida de los productores.

  • Aumentar la rentabilidad del campo.

  • Modernizar procesos con menos desgaste físico.

  • Lograr la autosuficiencia alimentaria en Durango.

Ya no es una idea. Ya es una realidad. Los drones están volando sobre nuestros campos para trabajar más rápido, con más precisión y menos impacto ambiental”, dijo el mandatario en su mensaje, dejando claro que la innovación llegó para quedarse.

SAGDR: respaldo en cada paso

El titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR), Jesús López, fue enfático al señalar que el campo no está solo. Desde su dependencia, se brinda capacitación, acompañamiento técnico y subsidios concretos.

Este programa dignifica el trabajo agrícola. Estamos cambiando la manera en la que se produce en Durango y eso tiene un efecto directo en la calidad de vida del productor”, señaló López.

Productores satisfechos: menos gasto, más cosecha

El testimonio más valioso no viene de los funcionarios, sino de los productores, quienes ya están usando esta tecnología y coinciden:
“Es un gran ahorro de tiempo y dinero. Además, ahora podemos fumigar terrenos donde antes ni el tractor entraba”.
Este tipo de transformaciones son las que marcan un antes y un después en el campo, al hacerlo más competitivo y menos dependiente de métodos obsoletos.

Una apuesta integral por el campo

Pero el plan no se limita a drones. El paquete completo incluye capacitación, proyectos fitosanitarios, seguimiento técnico y subsidios directos. Todo enfocado en lo mismo: lograr un campo más productivo, más sano y más rentable.

Además, estos programas son complementarios con políticas federales, lo cual potencia los recursos, amplía el alcance de la ayuda y permite replicar el modelo en más municipios.

Más tecnología, menos rezago

Durante décadas, el campo mexicano fue sinónimo de esfuerzo duro y poco reconocimiento. Hoy, con este tipo de estrategias, Durango se pone a la vanguardia nacional en agricultura digital y sustentable.

Con acciones como estas, se rompe el paradigma de que el campo debe ser lento, costoso o difícil. Ahora también puede ser ágil, moderno y rentable.

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