Tras un comienzo desfavorable, los de Santos Laguna mostraron su espíritu guerrero y lograron remontar, dejando a su afición llena de júbilo, con su afición respaldándolos, los Guerreros lograron una victoria dramática en el último minuto del encuentro. Después de estar perdiendo 2-0 hasta el minuto 65, el equipo despertó su instinto de lucha y logró revertir el marcador con determinación y coraje.
Necaxa, Líder del Primer Tiempo
El Necaxa inició el partido con todo, mostrando una superioridad en los tiros al arco. Su esfuerzo se materializó en el primer tiempo cuando, tras una mala jugada de Santos, se adelantaron en el marcador con un gol desde el punto de penalti. En la segunda mitad, los Rayos continuaron dominando y al minuto 63, con la entrada de nuevos jugadores, Cortez Pineda anotó el segundo gol para los hidrocálidos.
El Resurgir de los Santistas
Tras el segundo gol de Necaxa, todo parecía indicar que Santos sufriría otra derrota. Sin embargo, el equipo dirigido por Nacho Ambriz mostró una resiliencia impresionante. Al minuto 75, Fagúndez anotó el primer gol para Santos, revitalizando las esperanzas del equipo y su afición. Con la fe renovada, el empate llegó al minuto 81, gracias a un gol de Santiago Muñoz, quien devolvió a los Guerreros al juego.
Una Oportunidad Bajo la Lluvia
A pesar de que la lluvia complicó los últimos minutos del partido, esta pareció brindar una oportunidad para Santos. En el tiempo añadido, con 7 minutos más por jugarse, ambos equipos estaban ansiosos por anotar el gol de la victoria. Pero fue Santos quien aprovechó la oportunidad: en el minuto 98, un centro perfecto de Santamaría encontró a Tahiel Jiménez, quien cabeceó con precisión para sellar la victoria.
Victoria con Sabor especial
El pitazo final desató la euforia en el estadio. Los Guerreros celebraron con su afición, que había esperado tanto por este momento de gloria. Tras semanas de desilusión, la victoria trajo de vuelta la esperanza y la emoción al campamento santista, dejando claro que, después de la tempestad, siempre viene la calma.