Chelsea y Palmeiras se enfrentaron en el Mohammad Bin Zayed Stadium, dentro de la final del Mundial de Clubes. Los ingleses llegaron como amplios favoritos al partido decisivo y lo hicieron valer, ganando por 2-1.
El primer tiempo fue muy prejo para ambos equipos, pues el Palmeiras nunca se achicó y llegó el momento en el que fueron mejores que el equipo de Thomas Tuchel, pero no lo pudieron reflejar en el marcadro. La primera mitad se fue sin goles.
Para la segunda mitad, Chelsea se puso en ventaja con un gol de Romelu Lukaku apenas al arranque. Tras un centro por izquierda, el belga se levantó dentro del área para mandar un cabezazo potente y poner en ventaja a los inglses.
Poco le duró la alegría a los ‘Blues', pues minutos después hubo un remate dentro del área que parecía no tener peligro. Sin embargo, la jugada se revisó por una posible mano de Thiago Silva y se terminó señalando la pena máxima.
El encargado de cobrar fue Raphael Veiga, quien engañó perfecto a Mendy, mandando el esférico a su izquierda para empatar el encuentro.
El partido se fue a tiempos extra con el Palmeiras soñando en darle el título a su país, emulando lo que hizo anteriormente el Corinthians.
Sin embargo, un penal le abrió la puerta al Chelsea para levantar el título. Una mano dentro del área se señaló como pena máxima y Kai Havertz la hizo válida para hacer el 2-1, que mandó a los ‘Blues’ como campeones del Mundial de Clubes.
