En el ambiente vibrante de la recta final de campaña, la candidata Flora Leal lanzó un compromiso que ha encendido el entusiasmo de las y los habitantes de Lerdo: el esperado regreso del festival cultural que por años fue símbolo de identidad, arte y comunidad para esta ciudad.
Este evento, que durante tiempo congregó a familias, artistas y emprendedores locales, será revitalizado con una propuesta renovada pero fiel a su esencia original: celebrar el talento y la historia de Lerdo, y devolverle a la ciudadanía un espacio de encuentro, orgullo y alegría.
La voz del pueblo: un festival que vuelve
“Nos lo han pedido en las colonias, en las plazas, en cada recorrido: que regrese ese festival que era del pueblo”, afirmó Flora Leal, con la convicción de quien sabe que un proyecto cultural no es solo entretenimiento, sino una forma de reafirmar la identidad colectiva.
Aunque el nombre original del festival —el icónico Lerdantino— está registrado, la propuesta de Flora busca rescatar el alma de lo que el pueblo reconoció y disfrutó, adaptándolo a los tiempos actuales con una imagen fresca y con el mismo propósito de siempre.
¿Qué traerá la nueva edición?
La propuesta contempla un festival cultural anual que será gratuito y abierto a toda la comunidad. Algunos de sus pilares clave incluyen:
Participación de artistas locales: músicos, bailarines, creadores populares que tengan un espacio para mostrar su talento.
Apoyo a emprendedores y juventudes: espacios para exhibir, vender y compartir ideas, especialmente con enfoque en mujeres y jóvenes.
Promoción de identidad y memoria colectiva: actividades que refuercen el sentido de pertenencia y reconozcan el arte como un derecho para todos.
Integración con la marca “Hecho en Lerdo”: una plataforma regional que proyecta el orgullo por lo local y su calidad.
Con esta estructura, el festival no solo busca entretener, sino también impulsar el desarrollo social, económico y cultural del municipio.
Cultura: inversión para Lerdo
Flora Leal dejó claro que la cultura no debe verse como un gasto, sino como una inversión en la identidad y el futuro de la ciudad. “Lerdo tiene historia, talento y alma. Y vamos a devolverle el lugar que merece, también desde la cultura”, enfatizó.
Este enfoque es fundamental para entender la importancia de proyectos culturales en el crecimiento de una comunidad que busca no solo mejoras en servicios públicos o infraestructura, sino también en lo que verdaderamente se siente: la alegría, la expresión y la unión.
Más que un festival, un símbolo de comunidad
El compromiso de Flora Leal forma parte de una visión integral para Lerdo: una ciudad con vida, que avanza en todos los frentes pero que nunca pierde de vista lo que une a su gente.
“El cambio también se vive en lo que nos une como pueblo. Vamos a volver a escuchar música en las plazas, a ver a nuestras niñas y niños bailar, a sentirnos parte de algo más grande”, concluyó, evocando esa imagen del Lerdo vivo, orgulloso y en movimiento.