La diputada Mayra Rodríguez Ramírez, del Partido Acción Nacional (PAN), se plantó firme en el Congreso de Durango y soltó una propuesta que podría cambiarle la vida a miles de personas: incluir el derecho a la movilidad en zonas rurales como prioridad de justicia social, dignidad e inclusión.
No vino sola. Lo hizo a nombre de la Coalición Parlamentaria Unidad y Valor por Durango (PRI-PAN) y propuso reformar el artículo 32 de la Ley de Movilidad y Seguridad Vial. El mensaje es claro: moverse no debe ser privilegio urbano.
Justicia social sobre ruedas
La iniciativa tiene un objetivo que suena fuerte y claro: garantizar que las personas en comunidades rurales puedan desplazarse de forma segura y digna, sin importar su condición económica o geográfica.
Porque sí, en las zonas rurales muchas veces el traslado a una clínica, una escuela o incluso a un lugar seguro se vuelve un viacrucis. Y eso, dice Mayra Rodríguez, no puede seguir siendo visto como un lujo.
Ayuntamientos, a ponerse las pilas
La diputada plantea que los ayuntamientos se responsabilicen de fomentar la accesibilidad y la seguridad personal en los traslados rurales, especialmente para:
Adultos mayores
Personas con discapacidad
Mujeres
Niñas, niños y adolescentes
Comunidades marginadas
No se trata solo de parchar calles o poner camiones, sino de pensar en serio en infraestructura funcional y transporte digno que conecte a las comunidades con lo esencial: salud, educación, seguridad y bienestar.
El campo también importa
Mayra Rodríguez fue tajante: el enfoque de movilidad no puede seguir limitado a las ciudades. Los retos geográficos de lo rural existen, pero no pueden ser excusa para seguir excluyendo.
"Actuar con voluntad política es necesario, porque lo rural también tiene derecho a moverse con dignidad".
Políticas con enfoque rural
La reforma también busca que los municipios incorporen el desarrollo rural en sus planes de movilidad, tanto en la formulación como en la evaluación de sus acciones. Esto significa que las políticas ya no podrán ignorar:
Caminos y rutas accesibles
Transporte eficiente y continuo
Apoyos institucionales reales
Mantenimiento preventivo y participativo
Una deuda histórica
Esta iniciativa no es moda, es justicia histórica. Por años se ha dejado fuera a un sector fundamental de la población. La movilidad rural es el siguiente paso lógico para una legislación que se diga incluyente.