La delegación duranguense de tenis de mesa concluyó su participación en la Olimpiada Nacional 2025, celebrada en el Centro de Alto Rendimiento de Apizaco, Tlaxcala. Aunque los resultados no se tradujeron en medallas, el compromiso, el esfuerzo y el orgullo de representar a Durango se mantuvieron intactos desde el primer servicio hasta el último punto.
Categoría sub 19: garra sin recompensa
En la categoría sub 19, la duranguense Sofía Noelia García Ramírez se topó con rivales de alto calibre. En su primer encuentro, cayó 3-0 ante Mabel Rosario López de Jalisco, una de las favoritas del torneo. Posteriormente, enfrentó a Isabella Panes de Veracruz, quien también se impuso por marcador de 3-0. A pesar de los resultados, Sofía demostró temple y técnica, consolidándose como una de las atletas con mayor proyección del equipo.
Categoría sub 11: experiencia ganada
En la categoría sub 11, tres pequeños guerreros de la paleta dieron lo mejor de sí: Geremy Jareth González Bánuelos, Diego Adriel Aguilar Gurrola y Alejandro Ramírez Domínguez. A pesar de sus derrotas, la experiencia adquirida frente a los mejores del país es oro puro para su formación deportiva.
Geremy González
Perdió por doble 3-0 ante Gonzalo Guerra de Nuevo León y Nicolás Alegre de Baja California, dos rivales con gran nivel competitivo.
Diego Adriel Aguilar
Fue superado 3-0 por Nicolás Cuba del IPN y Patricio Enríquez del Estado de México. Su actitud y disciplina en la mesa dejaron claro que tiene futuro.
Alejandro Ramírez Domínguez
Cayó también 3-0 ante Aarón Álvarez de Guerrero y Mateo Gallegos de Nuevo León, quienes mostraron gran control y agresividad en el juego.
Un adiós con la frente en alto
Aunque la delegación duranguense no avanzó a rondas definitivas, se despide con la frente en alto y el corazón lleno de orgullo. Representar al estado en una justa organizada por la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) es en sí mismo un logro enorme que habla del trabajo de entrenadores, familias y atletas.
Mirando al futuro
El mensaje que queda es claro: la base está sembrada. Estos jóvenes deportistas adquirieron experiencia valiosa que, sin duda, les servirá para futuros torneos. Con el apoyo institucional adecuado, más fogueo y constancia, los resultados llegarán.
"Los resultados no nos definieron. Lo que nos define es la entrega, la pasión y las ganas de seguir creciendo", comentó uno de los entrenadores de la delegación.